miércoles, 31 de diciembre de 2003

Deseo



Gotas de vida,
de calor,
de cariño,
de lágrimas,
de amor,
de deseo,
de paciencia,
de alcohol,
para todos vosotros.


Suena la corriente: "Strings of the storm" - Elliott Murphy

martes, 30 de diciembre de 2003

Off-line



Cuatro días de desconexión vienen muy bien. Olvidar por un tiempo tu ciudad, tu mundo, tu trabajo, y hacerlo a conciencia se agradece. Y encontrarte con tu gente de toda la vida, la que sabes que siempre estará ahí, es reconfortante.
Si además la desconexión eres capaz de extenderla al mundo virtual en que durante muchas horas nos movemos, mejor que mejor. Sin correo, sin webs, sin blogs, sin ordenadores que interfieran tu ritmo.

Además, Madrid me ha parecido que estaba precioso. Es posible que fuera mi predisposición, pero incluso he llevado de buena gana las aglomeraciones casi inhumanas y los atascos infinitos. Y Madrid ya no es Madrid. Me fascina pasear por la calle Fuencarral saboreando decenas de idiomas, de acentos diferentes, de colores. Por mí que vengan miles, millones de ellos. Quiero perder nuestra identidad, o al menos mezclarla con la de otros, con la de cientos. La única Ley de Extranjería se la aplicaría a algún bigotillo que nos gobierna, para que se vaya a hacer guerras al fin del mundo.

En una casa que antes era la mía, ahora completamente vacía, excepto una cama, que al fin y al cabo es de donde venimos y donde terminaremos. Y una ciudad que durante mucho tiempo fue mía.

Pero está la vuelta a la realidad. A 300 y pico correos de los cuales el 70 por ciento son basura, al ordenador rigiendo nuestro ritmo, al horario de trabajo, a la rutina diaria. Al menos, también es una vuelta a Ella.

Y por cierto, repasando un poco esta bitácora, encuentro que he superado la primera criba del concurso Blogidol. Sorprendente. Gracias a los que lo habéis hecho, y el aspirante número 46 sigue adelante. Así que si queréis seguir haciendo clic, ya sabéis...


Suena la corriente: "The Essential" - Bruce Springsteen

viernes, 26 de diciembre de 2003

Viaje interrumpido

Son estos días propicios para los viajes. Miles de personas se echan a las carreteras, vías o aires para olvidar por un tiempo los lugares donde se fraguan sus alegrías y tristezas, éxitos o fracasos. Familias o amigos se unen sin importar los kilómetros recorridos para ello. Y los viajes de estas fechas tienen un cierto halo de melancolía del que carecen, por cierto, los estivales.

Incluso yo agarro mañana el coche para un viajecito a Madrid a ver a toda la gente que tengo por allí. Y siempre son agradecidos los encuentros.

También sabemos que muchos de estos viajes tienen un mal final, y esos encuentros quedan interrumpidos para siempre, con el aguijón añadido de ocurrir en estas fechas. Tal vez sea el impuesto que tengamos que pagar por nuestro desarrollo tecnológico.

Pero el viaje interrumpido que más me ha interesado estos días ha sido el de la nave europea Beagle2 a Marte. Tiene que haber llegado ya, o al menos tenía que haberlo hecho, pero aunque le llamamos, una y otra vez, no responde. Ni ella nos llama. Y nos ponemos nerviosos, pensamos lo peor, rozamos la zozobra. Imaginamos que puede haber tenido un problema inesperado, que todo esto es un mal sueño. Tratamos de no perder la esperanza.

Y a mí me parece una terrible metáfora de la masacre que ocurre a diario en nuestras carreteras.

Y como curiosidad, esa llamada que esperamos de la nave no es otra cosa que música, esa es la manera de comunicarse con ella. Y esa música son simplemente unas hipnóticas notas compuestas por Blur. Qué gran honor (por no entrar, en una espera tan incierta como la actual, en lo que hayan tenido que pagar, que, en este mundo, todo tiene un precio), pero qué terrible ansiedad debe estar provocando en ellos la espera. (Aquí podéis escuchar la sintonía, vía El País).

Duro, pero es ley de la vida que nos hemos montado

Suena la corriente: "Parklife" - Blur

martes, 23 de diciembre de 2003

Al menos no llueve



No hay viajes, no hay reuniones, no hay llamadas de teléfono, no hay nadie en el edificio. Estos días sólo queda un desnudo árbol que ver por la ventana, un cielo plomizo y la dictadura de Kiss FM en el ambiente.

"Por lo menos, no llueve", comentan por la oficina.

Una llamada despistada pregunta por su madre, y no, por más que buscamos, aquí no está.

Y pienso que igual nos hemos metido en un túnel, que llevamos meses aquí encerrados, que la vida ha seguido su camino, y nos la hemos perdido, absortos ante las pantallas del ordenador y la cada minuto más terrible dictadura de radio fórmula.

Y el que no se consuela, es porque no quiere.
Pues eso, que al menos no llueve.
Hala, que ustedes lo pasen lo mejor posible, y hasta el viernes!


Suena la corriente: "Whiskey for the Holy Ghost" - Mark Lanegan

lunes, 22 de diciembre de 2003

Va de bodas



Pues resulta que estos últimos días ha habido alguna que otra boda de postín. Ya, de la que más he leído ha sido la de Gwyneth Paltrow con el cantante de Coldplay, Chris Martin. Pero la que más me interesaba era la que han celebrado uno de mis iconos de juventud, Elvis Costello, con la cantante de jazz Diana Krall.

Esto de las bodas entre famosos supongo que viene a ser como cuando cualquier hijo de vecino se casa con su compañera de trabajo, pero a lo bestia. Porque en este caso no hay ajuar o plan de pensiones que aportar, sino fama y dinero (aunque según en qué casos). Y en muchas ocasiones, queda un tufillo de intereses creados que bien sirvan para relanzar tal o cual carrera.

No parece el caso de la Krall y el Costello. Ambos son artistas de prestigio reconocido y públicos a priori no influenciables por el boato y glamour de este tipo de enlaces. Cierto que Diana Krall es actualmente más una cantante de estándares para todos los públicos que la rubia de oro del jazz femenino que fue hace unos años. Pero el juntarse con Elvis Costello no parece que le reporte tirón popular, ya que éste es más bien autor de minorías.

Lejos quedan sus joyas pop de principios de los 80, cuando junto a The Attractions sembró de ritmos contagiosos cada uno de sus discos. Pero pronto empezó a flirtear con el country e incluso la música clásica.

Hace unos meses veía la luz su último disco, "North", perfecto artefacto para noches de melancolía e insomnio un sábado cualquiera, repleto de regusto jazzístico. Será que la influencia de su amada se ha dejado notar.

¡Y es que cuando el amor triunfa, no hay barrera estilística que resista su empuje!!!!
¡Jesús, cómo es esto de los arrumacos!


Suena la corriente: "The very best of" - Elvis Costello

sábado, 20 de diciembre de 2003

Frase



"¿Quieres dejar las drogas?
Llámanos.

Pasaremos a recogerlas"



Contado ayer por la noche (y recordado esta mañana, lo cual tiene mérito). Frase usada por alguien no identificado.



Suena la corriente: "Gas" - Los Enemigos

viernes, 19 de diciembre de 2003

Con fecha de caducidad



Existen iniciativas que, aunque en determinados momentos puedan resultar algo pretenciosas, no dejan de tener un alto sentido del riesgo.

La revista Matador nació con un concepto asombroso: periodicidad anual, tirada muy limitada y numerada, contenidos eminentemente culturales (pero abarcando toda clase de tendencias) y con fecha de defunción anunciada. Van a editar tantos números como letras del alfabeto. Esto hace que el último volumen, que corresponderá a la letra Z, tiene prevista su salida en 2022.

Pero de momento, aún van por la letra G, que bajo el genérico título de "Utopía" (qué palabra tan maravillosa y tan denostada actualmente) acaba de ver la luz. Continente bello y contenido interesante: Peter Coyote, Cabrera Infante, Muñoz Molina,…, y unas fotografías que, como es habitual, quitan el hipo.

Bueno, vale, es algo cara, pero como regalito para estas fechas puede quedar de lo más aparente y darte ese puntito de cultureta fuera de la oficialidad que tan bien sienta, siempre y cuando el destinatario sepa apreciarlo. Y además, eso de saber la fecha de muerte es de lo más estimulante.


Suena la corriente: "Diablo" - The Silos

miércoles, 17 de diciembre de 2003

Matrix existe!



Pensaba el otro día que el cerebro es un ente con vida propia. Igual nos creemos que nosotros somos el ser, cuando es aquél quien posee la esencia. Y para intentar sobrevivir, ha fabricado un cuerpo que le sirva de batería. Y para que ese cuerpo no se marchite, le ha dado una realidad virtual que le permita creerse un ser en sí mismo.

Y entonces, todo lo que me rodea, lo que soy, no es real. No existe mi vida, ni mi trabajo, ni mi familia, ni los amigos que creo reales, ni la tierra, ni el mar, ni el cielo, ni la música, ni Ella, ni Tiffany, ni estas letras.

Todo lo crea mi programa. Incluso los que yo mismo leo que contestáis estos párrafos, sois creación de mi programa. Gritaréis y diréis que no es cierto, que existís, pero esos gritos serán una ilusión.

Al menos quedará el consuelo de que cuanto granuja anda suelto por ahí, tampoco es real.

En fin, que en esto estaba el sábado noche, con una yerbita que creía de primera, y que por lo visto, tampoco era real (¿o sí?)


Suena la corriente: "Live MCMXCIII" - The Velvet Underground

lunes, 15 de diciembre de 2003

Tiffany



Ayer estuve con Tiffany. Hacía días que no la veía, y ya tenía ganas. La verdad, no es seguro que se llame así. Pero el auténtico nombre no lo sé. La conocí una mañana en que, tras una noche más loca que cuerda, yo sufría una resaca de las que no se olvidan. Me trató con mucha delicadeza. Para mí, besarle fue como un desayuno de vida. Y me acordé de la película "Desayuno con diamantes". Así que decidí llamarle Tiffany. Y nunca me ha dicho nada en contrario.
Describir algo tan querido no tiene mucho sentido, pues todo lo que dijera no sería otra cosa más que una obviedad: suave, tranquila, deliciosa, juguetona,…
El caso es que ha pasado a formar parte de esa parte de mi vida que merece ser vivida.

Supongo que Ella conoce la existencia de la otra, de Tiffany, aunque no que yo la llamo así. Pero no dice nada. Y yo tampoco. Llevamos el asunto con una tremenda madurez. Y yo no voy a renunciar a ninguna de las dos. Van unidas. No existe la una sin la otra. A día de hoy las necesito. Porque sé que cuando estoy triste, las dos están ahí. Que cuando necesito cariño, las dos me lo dan. Que cuando busco refugio, en las dos lo encuentro.

Y siempre estoy con las dos a la vez. Porque las necesito.

Quiero volver a verlas, desnudarle a Ella, besarle el cuello, descender por la espalda y besarle una pequeña peca que tiene en un lugar precioso, a la que yo llamo Tiffany, porque la conocí una mañana en que yo estaba de resaca...


Suena la corriente: "I believe" - Tim Burgess

sábado, 13 de diciembre de 2003

Y entra en la casa...



La realidad invade lo virtual, o lo virtual invade la realidad. Uno nunca está muy seguro de qué es lo primero. Pero si ya teníamos los reality-shows por todos lados, ahora llegan los reality-blogs.
¿En qué consiste? Pues una especie de Gran Hermano de blogs, donde las votaciones populares van eliminando a unos, y haciendo que otros avancen hasta la final. Esto es de manera muy resumida lo que nos propone Blog Idol. Han elegido 48 bitácoras (la verdad, no parece que haya sido una sufrida elección, ya que se presentaron 52), y a partir del lunes día 15 puedes votar por las que más te gusten para que permanezcan en la casa.

Ya. ¿Y qué hago yo ahí metido? ¿Buscar mayor tráfico hacia el blog? ¿Tratar de convertirme en el Jacinto de la blogosfera? ¿Divertirme un rato? ¿Molestaros con peticiones de voto? ¿Un desesperado intento de hacer méritos para ser elegido como contertulio en la próxima edición de Crónicas Marranas? Pues todo y nada de eso. Leí sobre la iniciativa y me pareció curiosa. En fin, puede ser que tanto ordenador esté empezando a trastornarme.

Ahora es cuando debería presentarme, decir que no vengo por el premio (por cierto, ¿cuál es?), que lo que quiero es vivir una experiencia nueva, que voy a ser tal como soy en la realidad, que no voy a cambiar, que no busco pareja, y demás zarandajas que llevamos cinco ediciones televisivas oyendo.
Pero me limitaré a invitaros, sólo si os apetece, quede claro, a que estiréis un poco el brazo, hagáis vuestro acostumbrado clic con el dedito sobre el ratón, y deis algún votillo al aspirante número 46, no sea que tenga que pasar el trago de ser el primer entrevistado por la Milá.

Ay, vanidosillo..., ¿pero de verdad crees que tienes alguna oportunidad?


Suena la corriente: "My way (The best of)" - Frank Sinatra

jueves, 11 de diciembre de 2003

Condones


Decía el presidente brasileño Lula Da Silva que "la Iglesia se equivoca al insistir en que el preservativo no protege contra el Sida y puede estar de este modo cometiendo un crimen más contra la humanidad".
Y uno se alegra de la valentía demostrada por Lula al decir con las palabras que corresponden una verdad como un puño, a pesar del inmenso poder que en su propio país tiene la Iglesia católica. No es cuestión de entrar a polemizar sobre los argumentos teológicos o morales que llevan al Vaticano a proclamar la castidad como único método fiable contra la enfermedad. Pero si son sus propios fieles y seguidores quienes no siguen dicho mandato, nada excusa el que usen como argumento que los preservativos no son un método válido pues el virus es capaz de traspasar la barrera que forman. Y no presentan ni un solo argumento científico que dé validez a dicha teoría (Iglesia y Ciencia nunca han hecho buenas migas).

Pero claro, todo lo arreglarán cuando dentro de unos años, después de que millones de personas hayan muerto por semejante estupidez, pidan perdón reconociendo que se equivocaron. Como hicieron con Galileo, con las Cruzadas, con la Inquisición, con la Segunda Guerra Mundial, con los abusos sexuales en USA, con Pinochet, con... (no, con Franco nunca han pedido perdón). La verdad, esto de la Misericordia de Dios para perdonar los pecados empieza a parecer un camelo de tomo y lomo en manos de la curia.

Y ya que hablamos de condones, unos minutos de publicidad (y juro que no tengo nada que ver con la empresa de la que voy a hablar, aparte de hacerlo como cliente). A mí también me jode usarlos cuando los necesito, pero más me jode saber que alguien se pueda volver inmensamente rico por una necesidad nuestra. Así que me gustó conocer hace años la marca sueca RFSU (y además son los mejores que he probado nunca). Es una organización sin ánimo de lucro dedicada a la investigación clínica de enfermedades de transmisión sexual, que se financia a través de la venta de condones. Así que si los tengo que usar, al menos que mi dinero no vaya a las manos de un tío para financiarle sus chalets, yates o vicios ocultos. En España es difícil encontrarlos, pero se pueden comprar desde su web.

¡Hala, a disfrutar!


Suena la corriente: "Alfagamabetizado" - Carlinhos Brown

miércoles, 10 de diciembre de 2003

¿Qué haría Ozzy?


¡Qué cosas! ¿Será que al final Dios existe y castiga a los chicos que son malos? ¿O será una simple jugarreta del destino, al que no le gusta que sus criaturas revivan segundas juventudes? El caso es que uno de los bichos malos, raros y siniestros del rock ha tenido un grave accidente cuando paseaba en su quad, esas pedazo motos/coches de cuatro ruedas, y se encuentra grave, aunque parece que su vida no corre peligro.
¿Que de quién hablamos? Pues de alguien que ahora mismo era conocido más por su faceta mediática que por sus canciones, el buenazo de Ozzy Osbourne. El que fuera cantante de Black Sabbath, y renacido de sus cenizas para convertirse en una estrella de la televisión norteamericana, vía MTV, por medio de una especie de reality-show que muestra el día a día de su desternillante familia.

Pues el parte médico dice que ha sufrido, entre otras cosas, rotura de clavícula y de una arteria que interrumpe el flujo sanguíneo hacia el brazo y con peligro de que la sangre encharque los pulmones. Suena fuerte, pero creo que al propio Ozzy le haría bastante ilusión estas detalladas explicaciones.

En fin, una prueba más de que no somos nada, pero, y esto es de verdad, espero que no tenga que arrepentirme del tono distendido de estas letras, y Ozzy vuelva cuanto antes a las pantallas y a sus quehaceres habituales.


Suena la corriente: "The complete Raw Mixes" - The Stooges

martes, 9 de diciembre de 2003

El bueno, el malo, el mudo y el bocazas


La guerra de Irak está consiguiendo dividir al mundo en muchos aspectos y el mundo de la música popular no se ha librado. Buena prueba de ello se ha visto en las votaciones para la entrega de los premios anuales de la Country Music Association (CMA) celebradas el pasado 15 de noviembre en Nashville.

La política lo invade todo, y algunos artistas se han pronunciado ante las actuaciones llevadas a cabo por la Administración Bush. Por un lado están los más afines al más rancio conservadurismo republicano, los denominados blue collars entre los que se encuentran artistas como Toby Keith, George Strait o Montgomery Gentry, y por otra parte los más pro-demócratas y pacifistas como las Dixie Chicks y, sorprendentemente, Merle Haggard (músico tradicional y red neck donde los haya).

Los blue collars quizás han confundido el tradicionalismo con el conservadurismo y se han dejado llevar por una estética vaquera excesivamente de película western, en la que hay buenos y malos que luchan entre sí a puñetazo y balazo limpio, como bien refleja una de las canciones que sin duda ha tenido mayor éxito este verano -"(Whiskey for my men) Beer for my horses- interpretada a dúo por el arrogante y engreído Toby Keith junto con el veterano y carismático Willie Nelson. Lamentablemente, el listillo de Toby Keith ha querido explotar al máximo el filón patriotero-militarista con un último single titulado "American Soldier" que suena a todas horas en las bases norteamericanas y exhibe una letra que no tiene desperdicio.

En el extremo opuesto están las alegres y vivarachas Dixie Chicks, trío de bombones sureños en edad de merecer, cuya voz cantante –Natalie- declaró en Londres durante su última gira que estaban avergonzadas de que George W. Bush fuese de Texas. Lo cual les ha llevado a la marginación y al boicot por parte de un sector de la prensa y de algunos de sus compañeros músicos, que las han calificado de "punks antipatriotas". A ellas esta situación les ha llegado a afectar hasta el extremo de renegar de la "familia country" para pasar a autoconsiderarse como un grupo de rock con raíces.

Todo este rollo político no le ha gustado nada a la CMA que ha castigado a todos los que han tomado una postura beligerante en este tema, sin darles ningún premio a pesar de sus posibles méritos artísticos. Afortunadamente para la CMA este año ha fallecido Johnny Cash, indiscutible icono y mito americano, y ahí estaba el buenazo de Alan Jackson ("el Príncipe") junto a su buen amigo Jimmy Buffet, que han realizado la perfecta canción del verano "It´s Five O´Clock Somewhere" divertida, pegadiza e intrascendente. Ellos son, sin duda, quienes han salido beneficiados de todo este revuelo político.

La verdad es que no sé por qué siempre tenemos que mezclar la política con el arte. Un artista no debería ser juzgado por sus opiniones personales, sino por su trabajo y sus canciones. Aunque también sería de agradecer que los artistas se esforzaran un poco en hacer letras más sutiles e inteligentes que no proclamen de una forma tan burda, clara y directa sus opiniones políticas personales.

Confieso que a mí me encantan las películas del oeste, pero entiendo que en la vida real no hay ni buenos tan buenos ni malos tan malos, y que la violencia siempre genera más violencia, por lo que contribuye a perpetuar los conflictos más que a resolverlos.

¡Más guitarras y menos pistolas!


Remado junto a Julio Rescuer

Suenala corriente: "Countrysides" - Cracker

viernes, 5 de diciembre de 2003

Sir Satanic Majestic


Por fin, Mick Jagger ha aceptado recoger de manos de la reina Isabel II el título de Sir el día 12 de Diciembre en el Palacio de Buckingham. Así que pasará a engrosar la lista de mofletudos y barrigudos (eh, no, bueno, no pensaba en Paul McCartney, ¿o sí?) personajetes aduladores de una corte en decadencia y que tratan por todos los medios de borrar un pasado del que no sé por qué se avergüenzan.

Y el bueno de Keith Richards está de uñas con su antaño compañero de fechorías, recordándole que las instituciones de ese mismo país les condenaron en el 67 por consumo de drogas y hicieron lo posible para que terminaran en la cárcel y dejaran de escandalizar a la pacata sociedad de entonces (y de ahora).

Uno no tiene muy claro si Kiz actúa por puro convencimiento o por pura envidia. Pero es bonito pensar que aún le queda algo de aquella canallesca que tanto gustaba a los que le considerábamos el auténtico alma de los Stones (con permiso de Brian Jones, claro).

Ya se que la gente tiene derecho a cambiar, a establecerse, a hacerse respetable, incluso aunque no renuncien a su pasado, pero es que el mundo de los clásicos del rock está cada vez más lleno de dinosaurios a un paso de la extinción. Y que conste que cuando tocaron hace unos meses este mismo año, allí estaba yo, que aunque ya no me interesen mucho, uno sigue siendo un mitómano. Será que yo también me estoy extinguiendo.


Suena la corriente: "How the west was won" - Led Zeppelin

jueves, 4 de diciembre de 2003

Una nueva cara

Bien, se acerca un nuevo año, y los regalos, las emociones y los sentimientos, sean sinceros o no, serán el centro en torno al que gire casi todo.

Nunca he sido un gran enamorado de estas fiestas, no me gusta estar alegre por decreto, veo que mucha gente sufre a pesar de todo, recordando muchas cosas y personas que no pueden olvidar aunque quieran. Y como no tengo ninguna intención de celebrar dicha época en estas líneas, he decidido al menos regalarme, y regalaros a los que leéis ésto, un nuevo traje. Como todo lo que se estrena, al principio resulta raro, incluso una cierta decepción puede aparecer, pero creo que ya era hora, dado que al menos he superado con mucho el tiempo que pensaba que Río Rojo duraría.

Así que a disfrutarlo, hasta que una nueva inquietud deshaga todo lo hecho. Espero que os guste.

Suena la corriente: "Phaseshifter" - Redd Kross

lunes, 1 de diciembre de 2003

Tiempos de Rock'n'Roll


Compré mi primera revista musical con 15 años. Un número de Popular 1. En el colegio, un compañero me dijo que me dejara de tonterías, y leyera Vibraciones. Y entonces caí en la tela de araña de toda aquélla gente. Gente que no sólo escribía sobre tal o cual grupo, que no solo se limitaba a criticar un disco, un concierto. Ponían algo de su vida en cada artículo, enlazaban directamente con el llamado nuevo periodismo americano, venían a ser una versión particular de todas aquéllas plumas que hicieron grande a la revista Rolling Stone (no tiene nada que ver con lo que es actualmente).
Vibraciones entró en crisis. Ya no salía al principio de cada mes, sino al final. La ansiedad que provocaba era total. Y entonces apareció Rock Ezpecial. Terrible título para una revista que se puso al día, dando cabida a todo lo que de bueno estaba dando el panorama nacional de los primeros 80. Pero como iniciativa demasiado ecléctica, terminó convirtiéndose en un batiburrillo de excesivas tendencias.

Y aun recuerdo un sábado, acercándome al kiosko, y descubriendo el número 0 de una revista de nombre evocador, Ruta 66, y descripción arrebatadora: Tiempos de Rock’n’Roll. Y ahí estaban todos, Ignacio Juliá, Jaime Gonzalo, Diego Manrique (al menos creo que en los primeros números), Oriol Llopis (cuánto echo de menos leerte, ¿dónde estás?).
Bien, habían decidido ser intransigentes, radicales, incluso sectarios, y centrarse en el rock que les gustaba. ¿Y qué tiene eso de malo? Creo en la especialización como base de todas las cosas hechas con el corazón.

Y durante muchos números, el Ruta fue mi alimento mensual, espiritual. Pero la vida da muchas vueltas, y me fui a vivir a Sudamérica. Y supongo que fue impagable el ver a mi madre ir todos los meses al kiosko a comprar el Ruta. Pero se me acumulaban y ya no los leía. Y uno se va haciendo mayor, y lo va dejando, dejando, dejando,…

Ahora, con varios años más, aún me produce una melancolía inmensa recordar aquéllos tiempos, aquéllas letras escritas con el desgarro de un puñetazo, que tantas veces me hicieron soñar, que tantas veces me incitaron a escapar, a no dejarme atrapar por la rutina de un sistema que tarde o temprano nos aliena.

Este mes de Diciembre, Ruta 66 cumple su número 200. Ahí siguen, igual de sectarios que siempre, igual de chulos que siempre, igual de maravillosos que siempre. No creo que nadie hubiera apostado un duro de los de antaño por el hecho de verles celebrando tal acontecimiento en pleno siglo XXI.

Me gusta creer (igual sólo soy yo el que lo cree) que aún me queda un puntito de rebeldía, que no soy un robot más de esta sociedad. Y ellos han tenido algo que ver en ello. Gracias y enhorabuena, chicos!!!!


Suena la corriente: "Easy Rider" (B.S.O.)