lunes, 9 de junio de 2014

Arizona Baby
Sala Backstage, Bilbao (07/06/2014)
La valentía del currante


Nunca hemos ocultado en Río Rojo que seguimos con la extrañeza del sorprendido y la admiración del convencido la carrera de Arizona Baby. Más de una vez les hemos dedicado espacio entre estas aguas y cada una de ellas nos reafirmamos en lo pensado. Así que es indudable que podemos caer en la reiteración pero no lo es menos que los pucelanos son una rara avis en el panorama musical nacional. (...)


Cierto es que hay otras bandas que siguiendo los caminos marcados por el folk han conseguido un nivel de aclamación más que interesante, pero también que suelen escorarse hacia la placidez sonora, alejados de complicaciones musicales. Cierto es que hay gente que transita por los rastros marcados por el rock’n’roll primigenio, por los sonidos de Nueva Orleans, por los polvos de las arenas del desierto, por los sonidos fronterizos americanos, por los cruces entre puntadas de psicodelia y pop, pero muy pocos se nos antojan capaces de conseguir la conjunción de todas esas rutas y mantener una personalidad tan propia e identificable. Y además conseguir que su música, siendo sencilla en estructura, adquiera la complejidad que exige la aportación activa del oyente, lo consiga y además haga que éste baile y la disfrute como si fuera (que lo es) la perfecta compañía para un sábado noche.

Pero es que además tienen la valentía de, a pesar de estar presentando su último single dedicado a las workin’ songs, centrar el grueso del concierto en su próximo disco, que aún están grabando y que por tanto es desconocido para prácticamente el total de la asistencia. Si no nos equivocamos, hasta cinco canciones sonaron del mismo, convirtiéndolo en el más representado de toda su producción. Evidentemente, es así como las canciones han de ir adquiriendo la personalidad que necesitan, y ellos lo saben y lo aplican a pesar de los riesgos. Y así, en esas canciones, comienzas a disfrutar los toques de slide del siempre excelente Rubén Marrón, o el ambiente casi coral, de estadio, con un Javier Vielba divertido y dicharachero, o les intuyes con puro sonido deudor de los 70 y con más de un ojo en el power-pop, o les ves casi acercándose a un sinfonismo folk con más de una reminiscencia a All along the watchtower (buen apunte, Angelote) con cambios de ritmo entre la aridez y la contundencia. Ciertamente, su nuevo futuro trabajo crea altas expectativas.

Que a su vez son acompañadas por las ya conocidas, la esplendorosa versión del 16 tons tomada de la propia de José Guardiola, la pura esencia Johnny Cash de It is called work, que uno intuye puro homenaje a I walk the line, el comienzo boogie de Everything que les pone a la vera de sus hermanos capilares ZZ Top, consiguiendo una arrebatadora pared psicodélica en If I could sobre un folk difícil pero bailable, centrando las varias patas sobre la que se asienta su aventura musical, trotando entre el rockabilly de Dirge y el ritmo hipnótico de Where the sun never sets entre guiños a Nueva Orleans, captando la transición de los 60 a los 70 en X’ed out, disfrutando cómo el Sr. Marrón acaricia la caja de la guitarra con su oído mientras cambia una cuerda sobre el ritmo creado por la batería y la voz de Vielba, o rindiendo pleitesía necesaria a la peligrosa Shiralee que sin embargo tantas puertas les ha abierto.

Como dijo el propio Vielba, poniendo en boca de su padre la deliciosa sentencia para vivir del cuento, andáis todo el día liados, no queda otra que currar.
Ellos lo hacen arriesgando, y el resultado ahí está.
*Compra el disco a través de Subterfuge
Suena la corriente: "16 Toneladas" - Arizona Baby


4 comentarios:

  1. Formidable cronica como de costumbre señores, me encantan los Arizona tienen un directo arrollador e increible, es mas estoy deseando volver a verlos. Abrazotes

    Manolo Granpa

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Granpa. No me cansaré de repetir que son una banda tremenda.

      Eliminar
  2. Estupendo post y concierto. Ellos grandes en escena y fuera de ella.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mejor fue haberlo compartido contigo, atikus.

      Eliminar