viernes, 2 de marzo de 2012

Jay Farrar / Will Johnson / Anders Parker / Yim Yames
New Multitudes (Rounder Records, 2012)
Comienza el año Guthrie


… Music is the language of the minds that travels
Carries the key to the laws of time and space
Lonesome train whistling down the silent wail of wind
Life is the sound, creation has been a song…
Hoping Machine (Woody Guthrie) (...)



Señor, tantos pobres intentos baldíos tratando de explicar lo que para uno es la música, y ahí está resumido en cuatro versos de nada, fáciles, tranquilos, sencillos, y llenos de filosofía vital.

Pero claro, Woody Guthrie es quien es, y cada día los demás nos empequeñecemos más y más, y si no fuera por obras como estas, no estaríamos tan vivos. Hablábamos hace apenas tres días de la edición de Mermaid Avenue: The Complete Sessions coincidiendo con el centenario del nacimiento de Guthrie. Y es que este año va a ser espléndido en noticias a cuenta de dicha efeméride. No hay más que ver el cartel del concierto que tendrá lugar el 10 de marzo en Tulsa.

Y disfrutamos también de New Multitudes, un nuevo eslabón en ese objetivo de sacar a la luz las miles de letras que dejó escritas, utilizando para ello a los auténticos depositarios de su espíritu, aquéllos que desde sus raíces han mantenido viva su esencia.
En este caso, cuatro nombres de relumbrón: Jay Farrar (Uncle Tupelo, Son Volt), Will Johnson (Centro-Matic, South San Gabriel), Anders Parker (Varnaline) y Yim Yames (My Morning Jacket). Ellos ya han aparecido más de una vez por estos ríos, porque son gente que ha alimentado esta enfermedad desde hace tiempo.

La historia no es muy distinta a la de Bragg y Wilco. Farrar y Parker, que hacia 2005 estaban inmersos en el proyecto común Gob Iron, son contactados por Nora Guthrie para bucear en el archivo y dar nueva vida a sus letras. Enterados que Yim Yames se estaba bañando por esas épocas en la misma piscina, le invitan al proyecto, y añaden a Johnson. Hay que reconocer que Nora está haciendo las cosas como debe ser, engrandeciendo la leyenda de su padre y con los pies en pleno siglo XXI.

A razón de tres canciones por barba (nunca dicho más literalmente), cada uno de los participantes aporta su propia trayectoria, llevando las canciones a su terreno, que queda engrandecido por unos textos de la época angelina de Guthrie, con continuas loas a la ciudad y al amor, dejando de lado su carácter más contestatario (aunque ahí está My Revolutionary Mind para que no se olvide).

Es curioso cómo todos los que participan en cualquiera de estos proyectos coincide en afirmar que en cuanto se enfrentan a una de sus letras, la música surge como por arte de magia, saben al momento lo que esas palabras necesitan para expresar musicalmente lo escrito. Y no me cuesta nada imaginar a Guhrie interpretando New Multitudes (Farrar) o ese himno popular que podría ser Changing World (Yames).

Pero es que igualmente encaja en el espíritu original un desarrollo como el que Johnson otorga a V.D. City, puro Centro-matic, con esa voz y esas guitarras arrastradas, llegando a un climax deudor del mejor y más eléctrico Neil Young, como en él es habitual.
Yim Yames aporta la visión más íntima y romántica a su lote, con My Revolutionary Mind evocando a esa sutil maravilla, Wonderful (The way I feel), que incluyó en su último disco, la ya nombrada Changing World o ese enfrentarse a una de las mayores soledades que es Talking Empty Bed Blues.
Will Johnson aporta su otra cara, la que desarrolla en South San Gabriel en la preciosa Chorine My Sheba Queen o en ese mirar a los ojos a todos nuestros miedos que es la hipnótica No Fear.
Parker nos ofrece la sosegada joya Fly High, puro country/folk/pop, para desahogarse después con un blues de raíz sureña en Angel’s Blues o el feliz canto de amor a una ciudad, Old L.A.
Y Farrar tiene el honor de cantar los versos que abren este texto, como si fueran puras piezas de Son Volt,  descolgarse luego con una preciosa canción de amor como es Careless Reckless Love y cerrar con el resumen de todo, New Multitudes.

Todo el disco es puro americana, pero las letras de Guthrie conectan esas raíces con los sentimientos más universales.

Suena la corriente: "Old L.A. (Parker)" - Farrar/Johnson/Parker/Yames


1 comentario:

  1. Te he dejado un premio en la Route.
    Aun no lo he escuchado a conciencia. Pero por supuesto que lo haré, este es un año Guthrie, por la efemérides y por la circunstancias sociales.
    Saludos

    ResponderEliminar