viernes, 4 de mayo de 2007

Con esta roña

Ahora que ya estamos bendecidos para conducir con unos vinitos en el cuerpo y sin mayores agobios, tal vez sea hora de retomar el puente de mando de la barcaza, que últimamente pasa más tiempo en dique seco que río abajo. Ya se sabe que un capitán sin fuego en la sangre y la garganta, nunca toca el horizonte. (...)


Pero es que además, las riberas están tan nauseabundas, que de lo único que hay ganas es de echar el ancla, tumbarte en la hamaca, acariciar el bourbon (el malta cerca por si fuera necesario), calarte bien la gorra, soñar con Ella y que rasgue la música.

Y con esta edad, esta molicie y esta roña, ni me importa que las notas no añadan nada nuevo. Que Bow Thayer suene a clásico, con la humildad de quien invita a Levon Helm como si fuera el mismísimo dios, y sólo hace música de siempre, ayuda a tragar el trago que trago.

Un día de estos me limpio las legañas, tapono las vías de agua, baldeo la cubierta y… y… y… me vuelvo a tumbar en la hamaca.
Seguro.


Suena la corriente: "The way that it swings" - Bow Thayer