lunes, 25 de octubre de 2004

Septuagenario

Alguna vez he leído por ahí (si no cito fuente es porque no la recuerdo, y no me gusta atribuirme ideas ajenas) que cuanto más joven es uno, más interés siente por los grupos, y que a medida que su edad se eleva, tiende más a los solistas (aquéllos que hayan echado a volar su imaginación más libidinosa, desistan, que simplemente hablo de música).

En fin, no deja de ser una sentencia bastante relativa, porque son tropel los grupos a los que podría citar y con los que aún mantengo relaciones sentimentales. Pero echando un vistazo a mis últimas incursiones, sí reconozco que los solistas son mayoría. Tampoco es que vaya a negar los años que, año tras año, me van cayendo, pero vamos, como que quiero creer que no influyen en mi selección personal.

Porque lo que me une a los sonidos que me sirven de suero es más una cuestión que viene de dentro, y a pesar de mis paseos por las cercanías de ciertos límites, espero no estar muy podrido por ahí.

Pero claro, por otro lado, me doy cuenta que espero ansioso el echarme sobre pecho y espalda (mejor entre oreja y oreja) el nuevo "Dear Heather" de un ya septuagenario Leonard Cohen, y que casi prefiero hablar de él antes de escucharlo, por esos miedos a la decepción que este tipo de reencuentros me producen.

Joder, 70 años ya!
Bueno, venga, vale, prometo la semana que viene desempolvar mis viejos vinilos de los Undertones. He dicho los viejos vinilos, no a ellos (que también tienen ya sus años).



Suena la corriente: "I'm your man" - Leonard Cohen