
Tengo amigos a los que veo cada unos cuantos años. En esos encuentros, la verdad, no perdemos mucho tiempo comentando cómo nos ha ido desde la anterior vez. Nos miramos, un par de frases resumiendo situaciones, y pasamos a lo que realmente nos interesa, el presente, el seguir compartiendo las cosas que nos unen y que hicieron que naciera una amistad que perdura a pesar de las distancias físicas y geográficas o las temporales interrupciones de contacto. No habrá roce, pero el cariño viene de hace mucho tiempo. (...)