martes, 23 de septiembre de 2003

Mi cielo particular

Fin de semana largo, lleno de carretera, camino, risa, amigos, grandes canciones y otras yerbas.
Ahora, mis zapatos me llevan en dirección a mi cielo particular. Los observo mientras caminan, y caigo en la cuenta que debo comprar unos nuevos. ¿Cuánto costarán ahora? No se, desde hace tiempo todo se me hace más cuesta arriba. Pero no todo está perdido. Enciendo un cigarro y empiezo a silbar. En mi cielo particular me esperan, simplemente para dar y tomar unos sorbitos de cariño.