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viernes, 13 de marzo de 2015

Sonic Trash
Látigo (Guns of Brixton Records, 2015)
Brigada contra el mal silencio


Puritita balacera de rock’n’roll, pinche cabrón. Bien queda dicho en ese inicio/final mejicanizado que acompaña a El baile del cocodrilo, apertura de este Látigo, segundo trabajo de los bilbaínos Sonic Trash. Y pocas veces un disco ha lucido con tal porte tan buen nombre. Porque eso es lo que nos presenta, diez latigazos, diez descargas eléctricas desollando cualquier espalda que encuentren. (...)


Ya en ese baile de saurios bien se escuchan y sienten dichos chasquidos cada vez que la voz grita un Detrás de ti que va arrancando jirones de piel, un detrás de ti escondido entre una marabunta eléctrica de guitarras desbocadas y pulsiones rítmicas imparables. Detrás de ti, detrás de ti, latigazo a latigazo.

Un inicio de disco tremendo en el que Mariana y su batería, David Hono y J. Arias y sus guitarras y Ekaitz Hernandez y su bajo se convierten en lo que realmente son. Una brigada contra el mal silencio. Es la ausencia de sonido un elemento fundamental, desde en la música hasta en la vida. Pero es el mal silencio el que nace de la humillación, de la obsecuencia, del ordena y callo, el que sólo puede combatirse a golpe de trallazo sónico. Todo cuadra una vez más de manera nominal. Sonic Trash se convierten en esa brigada sónica, rabiosa, peligrosa, sembradora de urticarias para que se rasquen los de arriba y calentadora de las alcantarillas en las que nos movemos los de abajo. Y lo hacen a base de distorsión nacida de los esputos del pre-punk, del punk y del after-punk, esto es, del garage, del glam, del muro sónico de Detroit, de la intensidad entendida con la fuerza que da el odio puro, como aquellas Hipnosis e Inercia que desplegaran Lagartija Nick hace años y de la que Sonic Trash extrae buena parte del alma (y casi del nombre). Así, nada sorprende la estela bailable de El baile del cocodrilo, la brutal carga casi psychobilly de Zamudio Boogie (que gran nombre!), el punk desabrido a golpe de boogie de Santo Tomás, el arrastrado e hiriente siniestrismo de Agonía, el síncope de Bang, las venas urbanas atoradas por el peligro de Venganza, pura adicción al riesgo, o las gotas de disonancia free que uno intuye en el saxo de Látigo. Riffs opacando unas voces tratadas como un instrumento más, sin importar que parezcan en ocasiones simples sonidos guturales al servicio del todo.

Podíamos esperarlo, también es cierto. Nacidos de aquellos rescoldos de YaTeDigo, su Hey Chica! de hace tres años, primer disco como Sonic Trash, ya regalaba bofetadas como Cabronazo. Sí, podíamos intuirlo. Pero no queríamos creerlo. Porque una evolución tan sólida, tan contundente, acalla nuestros silencios y nos enfrenta a nuestros miedos.

La brigada contra el mal silencio está en marcha y parece imparable.
* Sonic Trash presentan 'Látigo' esta noche en Stereorocks Kafe Antzokia
*Compra el disco a tu dealer habitual o a través de Guns Of Brixton Records
Suena la corriente: "El baile del cocodrilo" - Sonic Trash


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